En su intervención ante la 58 sesión del Comité Ejecutivo del ACNUR, abierta hoy en Ginebra, Lulichki añadió que Marruecos, que permanece preocupado por la situación precaria de los marroquíes secuestrados en estos campos que carecen de sus derechos más elementales, no dejó de pedir al ACNUR poner fin a esta situación anacrónica permitiendo a estas poblaciones beneficiarse de la asistencia adecuada y poder elegir libremente su vuelta a su país, Marruecos.

Desde 1975, el Reino pide un censo viable y creíble de la población de los campos de Tinduf, y desde esta fecha, el gobierno argelino se niega sistemáticamente a realizar o permitir este censo, señaló.

El diplomático marroquí precisó que "la negativa del gobierno argelina a proceder al censo o a autorizar el ACNUR cumplir su misión explica la voluntad de los responsables de este país de utilizar los sufrimientos de las poblaciones de los campos para bloquear toda perspectiva de solución" de la cuestión del Sahara que opone desde 1975 Marruecos al +Polisario+, apoyado por el régimen argelino.

Por otra parte, Lulichki subrayó que Marruecos, que se ha convertido en país de origen, de tránsito y de recepción de la migración clandestina, apoya los objetivos de la agenda para la protección elaborada por el ACNUR y coopera plenamente con la agencia humanitaria para su aplicación.

El responsable marroquí destacó el compromiso de Marruecos hacia las actividades del ACNUR que ha cruzado una etapa importante hacia la consolidación del partenariado entre las dos partes a través la firma en julio pasado de un acuerdo de cooperación para el refuerzo de las relaciones bilaterales.

Fuente: MAP
- Noticia relativa a la cuestión del Sáhara Occidental-